Cuatro historias verdaderas e impactantes describen el perfil de la conducción con sueño.
Rusty se salió de la carretera cuando conducía a casa después de una fiesta de graduación. A solo unos segundos de llegar, su auto cruzó la línea central, golpeó un terraplén, y se volteó, dejando a Rusty paralizado.
Tom se durmió al volante cuando conducía a casa con su esposa, Jane. Casi llegando, se durmió en un microsueño de 4 segundos, chocó su auto, y Jane murió.
Kevin iba en su bicicleta cerca de su casa, lo golpeó una mujer que salía del trabajo después de salir de su turno nocturno.
Maggie conducía al trabajo cuando murió en un choque de frente. Su muerte condujo a la Ley de Maggie en Nueva Jersey, el primer estado en reconocer como ilegal conducir con sueño.
El clavadista olímpico Bruce Kinball conducía con capacidades disminuídas, atropello a un grupo de adolescentes, matando a dos e hiriendo a otros.
Una carrera fatal en Oregon le costó la vida a una niña de 10 años, y dos jóvenes fueron sentenciados a prisión.
Manténgase concentrado en conducir para mantenerse seguro al volante
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